INGREDIENTES:
· Masa de pizza casera (la receta la tenéis en el blog)
· 4 cebolla medianas
· ½ rulo de cabra
· Tomate frito
· Queso mozzarella (una bolsa pequeña)
PREPARACION:
Pelamos y picamos en juliana muy finita la cebolla y la ponemos en una sartén con un poquito de aceite y la vamos haciendo poco a poco para que se vaya caramelizando en su propio jugo. Mas o menos suele tardar en hacerse unos 45 minutos, cuando veáis que la cebolla esta blandita y de color tostadito (no quemado, color café con leche) retiramos la sartén del fuego y dejamos que se temple.
Cogemos la porción de masa que queramos, la amasamos y estiramos con el rodillo, si quieres que sea una masa esponjosa déjala gordita la base y si la deseas crujiente estírala mucho.
Opcional es si quieres rellenar el borde con queso o no.
Pones en la base de la pizza un par de cucharadas de tomate, lo esparcimos bien y ponemos encima una buena capa de queso mozzarella. Encima pondremos la cebolla caramelizada y la mitad del rulo de cabra que habremos cortado en rodajitas y estas en 4 trozos, para poder esparcirlas mejor. Di prefieres que sean las rodajas enteras también queda buenísimo.
Opcional si queréis y os gusta podéis ponerle una latita de anchoas en aceite encima, queda buenísima la pizza.
Horneamos a 180 /190 grados, calor arriba y abajo y la pizza a media altura, durante 25 minutos o hasta que veáis que ya están hechas, cada horno es un mundo.
Cortar al gusto y ¡¡a comer!!
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